Un laboratorio de pruebas de drogas en el condado de Palm Beach y 10 centros de tratamiento en el sur de la Florida trabajaron juntos para facturar fraudulentamente más de $ 141 millones en pruebas de orina no justificadas de adictos a las drogas, dijo el martes el fiscal del mencionado condado, Dave Aronberg
Aronberg indicó que 15 personas fueron arrestadas en este operativo en Florida, lo que aumentó el número total de detenciones por parte del programa Fuerza de Tareas de Hogares Sober a 85 aprehensiones desde 2016.
El grupo de investigación coordinó su trabajo con la policía en Pennsylvania, donde 20 personas más fueron arrestadas en relación con el plan. Aronberg señaló que todo es parte de los esfuerzos mancomunados de la fuerza de trabajo para detener la llamada “barajada de Florida” que busca la atención de personas con problemas de adicción a las drogas con la promesa de una supuesta recuperación, sin embargo termina abandonándolos en la calle cuando se termina su póliza de seguro.
“La confusión de la Florida no termina en la frontera del condado, y ciertamente tampoco termina en Palm Beach”, dijo en una conferencia de prensa en la tarde. “Hoy se envía un mensaje a aquellos laboratorios que participan estos esquemas de fraude que no podrán esconderse detrás de los muros corporativos para ocultar actividades ilegales” agregó Aronberg.
Los funcionarios del Condado de Palm Beach han desplegado un gran equipo de trabajo integrado por abogados, funcionarios de salud, policías y especialistas en rehabilitación para enfrentar la epidemia de opioides que mata a cientos de personas al año solo en el Condado de Palm Beach. En la cruzada antifraude llevada a cabo por la fuerza de tareas se han arrestado a los propietarios de algunas casas de rehabilitación inmiscuidas en dicho caso.
Narcan, el aerosol nasal recetado para detener sobredosis, era utilizado de manera indiscriminada en los pacientes y ahora se puede comprar sin receta. También se evidenció el aumento en el uso de fentanilo, un analgésico sintético 100 veces más potente que la morfina, y carfentanilo, 10,000 veces más fuerte que la morfina, lo cual contribuyó a la cantidad e intensidad de las sobredosis.
El detective Mark Berey del condado de Palm Beach dijo que el laboratorio de Lake Park realizó pruebas adicionales e innecesarias en cada muestra de orina para que los propietarios de estos centros de rehabilitación pudieran obtener más dinero de las compañías de seguros. Dijo que entre el 30 y el 50 por ciento del dinero que obtuvieron de cada prueba se devolvió a los centros de tratamiento.
Fuente: Miami Diario