Un jubilado estadounidense ganó 344,6 millones de dólares gracias a unos números escritos en la «galleta de la fortuna» que le regaló su nieta. Esos números los usó para jugarlos en la lotería y se convirtieron en el premio gordo.
Charles Jackson, de Carolina del Norte, se llevó el sorteo de Powerball, con la galleta ofrecida durante una cena en un restaurante vietnamita: «Miré los números detrás (del papel) y dije que quizás querría jugarlos. De ahí vino todo».
Luego, los jugó con regularidad en varios sorteos.
«Nunca esperé ganar, simplemente tuve suerte», dijo.
Fuente: Infobae.