El índice de precios al consumo (IPC) se situó en el 1,7% interanual en el mes de septiembre, la misma cifra que en agosto, en tanto que tasa mensual no subió nada, según informa este jueves la oficina de estadísticas laborales del Departamento de Trabajo estadounidense. Los analistas de Bloomberg esperaban que subiera al 1,8%.
En comparación con el mismo mes de 2018, los precios de la energía descendieron un 4,8%, frente a la caída del 4,4% de agosto. De su lado, los precios de los alimentos crecieron un 1,8%, una décima más que el mes precedente.
De este modo, la inflación subyacente, aquella que excluye de su cálculo el precio de los alimentos y la energía dada su mayor volatilidad, se situó en el 2,4% en el mes de septiembre, la misma cifra que la registrada en agosto.
En términos mensuales, la inflación del país norteamericano se mantuvo sin cambios en el noveno mes del año, al tiempo que la inflación subyacente registró un alza del 0,1%.
La inflación de Estados Unidos se mantuvo controlada en septiembre por la caída de los precios de la gasolina y los vehículos usados, compensando los aumentos en el alquiler y los alimentos preparados. La tasa de inflación baja y estable, reflejada en el IPC y otros barómetros de precios, le da a la Reserva Federal margen para reducir las tasas de interés si la economía de EEUU se debilita. Los precios subieron por el alquiler, la atención médica y las tarifas de las aerolíneas, pero cayeron bruscamente por los vehículos usados y la ropa.
Los aumentos en el costo de los automóviles y la ropa usados habían elevado los precios generales al consumidor durante el verano. Después de ajustar por inflación, los salarios por hora se mantuvieron estables el mes pasado. Han aumentado un modesto 1,2% en el último año. La encuesta de precios al consumidor tiende a ser más alta que el barómetro de inflación preferido de la Reserva Federal conocido como el índice de precios para gastos de consumo personal. El PCE aumentó solo un 1,4% durante el año pasado, muy por debajo del objetivo de inflación del 2% de la Reserva Federal.
Fuente El Comercio