Sigue en aumento el número de muertos en el almacén incendiado en Oakland

981

(Miaminews24).-  Hoy las autoridades informaron que al menos 33 personas han muerto en el incendio que arrasó el viernes un almacén en el que se celebraba un concierto en la ciudad californiana de Oakland (EEUU), además informaron que esa cifra puede aumentar.

El sargento Ray Kelly, de la Oficina del Sheriff del condado de Alameda, confirmó ese número en una rueda de prensa, en la que precisó que los equipos de rescate han rastreado «entre el 35 y el 40 por ciento» del edificio.

«Hay adolescentes, adultos jóvenes y personas en la treintena (de años)» entre las víctimas, indicó Kelly, al concretar que se han hallado fallecidos de «17 años, posiblemente más jóvenes».

«Tenemos víctimas de otros países. Estamos en proceso de contactar con sus embajadas. Son países de Europa y Asia«, agregó el sargento.

En la misma rueda de prensa, la alcaldesa de Oakland, Libby Schaaf, afirmó que un «equipo de investigación criminal se ha activado como precaución» en relación con el suceso, si bien ninguna pesquisa de ese tipo se ha abierto aún oficialmente.

«Es demasiado pronto para tener sospechas sobre lo que causó este fuego», adujo la alcaldesa, quien incidió en que hay «muchos testigos a los que entrevistar».

El sargento, que calificó de «astronómico» el número de muertos, advirtió de que esa cantidad podría incrementarse, pues se desconoce «la gente que había o que escapó» del siniestro.

«Estamos empezando a llegar a zonas del edificio en las que estamos encontrando más víctimas», explicó el sargento, quien señaló que los expertos necesitarán pruebas de ADN para identificar los cadáveres.

Por eso, Kelly instó a las familias de las víctimas a «preservar cualquier evidencia» que contenga ADN, como un mechón de cabello o un cepillo de dientes, para que sirva de ayuda en el proceso de identificación genética de los fallecidos.

«Es una cosa terrible tener que decir eso, pero es con lo que debemos lidiar aquí», reconoció el dirigente policial.

El fuego se declaró antes de la medianoche del viernes en el barrio de Fruitvale en Oakland, a unos 20 kilómetros de San Francisco, en un gran edificio de dos plantas y aire bohemio que albergaba estudios de artistas y estaba abarrotado de muebles, cuadros, lámparas, esculturas y alfombras, entre otros objetos.