(MiamiNews24).-«No necesitas ser un fanático del fútbol para haber escuchado de esta super estrella francesa«… Así parte la nota de Kylian Mbappé en la revista Time, que lo escogió como uno de los «líderes de la nueva generación» junto a otras personalidades del mundo del espectáculo, el arte, la política y el activismo social.
Es que los años 2017 y 2018 han sido de explosión y crecimiento exponencial para el nacido en el suburbio parisino de Bondy, un lugar marcado por los prejuicios contra los inmigrantes.
«Mi vida ha cambiado completamente. Comenzó con una transferencia muy cara a París Saint-Germain, de la cual se ha hablado mucho. La Copa del Mundo siguió esa línea. Aunque yo estoy muy feliz y viviendo la vida que siempre había soñado, siento que me he perdido de algo. No he tenido los momentos que la ‘gente normal’ tiene en la adolescencia, como salir y difrutar. Me metí de inmediato en el mundo de los adultos y se me exigió comportarme así», comentó el delantero.
A pesar de su éxito, el francés conserva la humildad y la pone como un valor fundamental.
«Creo que es la base de todo. He aprendido que las mayores estrellas y los jugadores más grandes son los más humildes, los que más respetan a la gente. Esa es la razón por la que son respetados por todos. Podemos ser los mejores y los campeones del mundo, pero en cuatro años eres olvidado porque alguien lo hizo mejor que tú. Creo que esos tres son los tres criterios: respeto, humildad y lucidez», expresó.
El francés fue consultado por su decisión de entregar el premio de la Copa del Mundo a la beneficencia.
«No necesito que me paguen. Estaba allá para defender los colores de mi país. Además, gano suficiente dinero, mucho dinero. Así que creo que es importante ayudar a los que lo necesitan. Mucha gente está sufriendo, mucha gente está enferma. Para gente como nosotros, dar una mano a la gente no es gran cosa. No cambia mi vida pero sí cambia la de ellos. Y eso es un gran placer», cerró.
Fuente:CFD.