Se esperaba que hasta 30 mujeres conversaran este martes con un juez, luego que éste las invitara a participar en una audiencia después de que el financiero Jeffrey Epstein se suicidó antes de enfrentar cargos de tráfico sexual.
La audiencia del martes por la mañana fue programada la semana pasada por el juez federal de distrito Richard Berman, quien presidió el caso que los fiscales presentaron contra Epstein después de que el acusado convicto de 66 años fuera arrestado el 6 de julio después de llegar a un aeropuerto de Nueva Jersey desde París.
Un forense de la ciudad de Nueva York clasificó formalmente la muerte como un suicidio. Murió el 10 de agosto.
El juez fijó la audiencia después de que los fiscales le pidieron que retirara los cargos contra Epstein ya que el acusado está muerto. Berman dijo que les daría a los fiscales, abogados de Epstein y cualquier víctima la oportunidad de hablar.
Desde que se programó la audiencia, se reveló que Epstein firmó un testamento solo dos días antes de su suicidio poniendo más de $ 577 millones en activos en un fondo fiduciario. Se esperaba que el testamento, presentado en las Islas Vírgenes donde Epstein mantenía una residencia, dificultaría que decenas de acusadores cobraran daños.
Epstein se declaró inocente de los cargos de tráfico sexual y fue detenido sin fianza, acusado de abusar sexualmente de mujeres a principios de la década de 2000 en mansiones en Manhattan y Florida.
Desde su muerte, el enojado Fiscal General William Barr ha prometido que cualquier persona que ayudó a Epstein en el tráfico sexual será perseguido en una investigación continua.
También retiró al director interino de la Oficina de Prisiones de su cargo, colocó a dos guardias que se suponía que estaban vigilando a Epstein la mañana en que murió con licencia administrativa y reasignó temporalmente al alcaide al Centro Correccional Metropolitano.
Barr ha dicho que los funcionarios habían descubierto «irregularidades graves» y estaba enojado porque los miembros del personal en el cierre federal no habían «asegurado adecuadamente a este prisionero».
En el momento de su muerte, Epstein se estaba preparando a través de sus abogados para argumentar en los documentos judiciales que debían en septiembre que no podía ser procesado porque firmó un acuerdo de no enjuiciamiento con fiscales hace una docena de años en Florida. Los fiscales en Nueva York dijeron que el acuerdo no impedía los nuevos cargos. Epstein lo firmó antes de declararse culpable de los cargos del estado de Florida en 2008, admitiendo relaciones sexuales con adolescentes menores de edad.
El suicidio ocurrió a pesar de una advertencia a fines de julio cuando Epstein fue encontrado en el piso de su celda con moretones en el cuello. Después de la muerte de Epstein, Berman le pidió al director de la cárcel respuestas sobre ese episodio, diciendo que nunca había sido «explicado definitivamente».
Epstein pasó unos días bajo vigilancia suicida, pero luego fue transferido de regreso a una celda en una Unidad Especial de Vivienda donde tenía un compañero de celda. Eventualmente, sin embargo, el compañero de celda fue sacado y lo dejaron solo.