Diego Armando Maradona falleció hoy 25 de noviembre en una casa alquilada en el partido de Tigre, Provincia de Buenos Aires, tras sufrir un paro cardíaco a los 60 años de edad.
La vida de Maradona fue una montaña rusa de emociones internas y acciones que enamoraron al mundo con su manera de jugar al fútbol y repudiado por el abuso y las adicciones.
Un hijo no reconocido, fotografías con la mafia y grandes fiestas con cocaína: es increíble que Diego Maradona haya tenido tiempo de convertirse en el mejor futbolista de su generación.
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El astro del fútbol
Y sin embargo, durante sus siete años en Napoli, Diego Maradona catapultó a un equipo no reconocido a convertirse en campeón de la liga italiana —dos veces—, ganó la Copa del Mundo con Argentina y estuvo a punto de defender el título.
Maradona, fue un famoso caprichoso, siempre luchando con sus demonios y aún por encontrar la paz con una vida vivida imprudentemente y sin disculparse.
El fútbol, dice Maradona, «era mi salvación», que lo sacó a él ya su familia de la pobreza cuando ascendió en las filas de Argentinos Junior y Boca Juniors, antes de irse a Barcelona por una tarifa de transferencia que logró un récord mundial en 1982.
«El chico de Oro» recolectó botas de oro como juguetes de cajas de cereales; anotó posiblemente los goles más famosos e infames del deporte en el mismo juego. Para muchos napolitanos y argentinos, Maradona era un dios.
Pero o mueres como un héroe o vives lo suficiente como para verte convertido en un villano.
Este fue el caso cuando la vida personal de Maradona pasó a eclipsar sus hazañas en el campo.
Las drogas que lo hacían el «Súper Diego»
Paralelo al genio en el campo que era Maradona, el alcohol y las drogas fluían. «Un golpe y me sentí como Superman», recuerda Maradona de su primera experiencia con la cocaína en Barcelona.
Como jugador de Napoli en el apogeo de su adicción, Maradona cuenta que hacía fiestas de domingo a miércoles, pero regresaba a su casa y se encerraba en el baño para esconderse de sus hijas, que eran unas niñas pequeñas para entonces.
Contacto directo con la mafia Italiana
El documental publicado en 2019 muestra las veces en que Maradona entró en contacto con la Camorra, la mafia napolitana, mostrando a Kapadia con fotografías del futbolista sonriendo junto a miembros del sindicato del crimen.
Alcohol como un escape
Maradona a pesar de todos los infortunios que tuvo a través de su adicción a las drogas, no paró y busco un «escape» no tan letal como las sustancias pero dañino al final y fue el alcohol.
El anterior médico de cabecera de Diego, Alfredo Cahe, confirmó tras visitarlo en la clínica a principios de noviembre 2020 que el exjugador sustituyó la cocaína por el alcohol.
Diego tenía planeado después de su operación de un Edema cerebral comenzar un largo tratamiento para tratar su adicción en Nordelta junto a su familia y personal especializado.
Diego, deja sin duda una huella difícil de borrar tanto en las canchas que lo llevaron a ser catalogado como el más grande de los futbolistas, como su vida extravagante, despreocupada y de excesos. El fútbol se queda sin su máximo exponente.
Redacción MiamiNews24 –con información de CNN-Clarín
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