Este 21 de septiembre se conmemora el Día Mundial del Alzheimer, una fecha que busca generar conciencia sobre la forma más común de demencia, una enfermedad neurodegenerativa que afecta la memoria, las funciones cognitivas y la capacidad de realizar tareas cotidianas.
Aunque no existe una cura definitiva, los expertos coinciden en que es posible mantener la calidad de vida de quienes la padecen mediante hábitos saludables y acompañamiento emocional. Estar físicamente activo, mantener aficiones, compartir tiempo con seres queridos, comer bien y realizar chequeos médicos regulares son acciones clave para preservar el bienestar.
El cuidado del entorno también es fundamental. Los cuidadores (familiares o profesionales) enfrentan desafíos físicos y emocionales que impactan su salud. Por ello, brindarles apoyo, formación y espacios de contención es parte esencial de una respuesta integral frente al Alzheimer.
La fecha invita a reflexionar sobre la importancia de la memoria como parte de nuestra identidad, y sobre el valor de construir redes de cuidado que dignifiquen cada etapa de la vida.