La crisis diplomática entre Colombia y Estados Unidos se intensificó este lunes, luego de que el presidente Donald Trump calificara al mandatario colombiano Gustavo Petro como “capo de la droga” en su red Truth Social. En respuesta, la Cancillería colombiana llamó a consultas al embajador Daniel García-Peña Jaramillo, quien ya se encuentra en Bogotá.
Trump acusó a Petro de “impulsar con fuerza la producción” de drogas en “grandes y pequeños campos de cultivo por toda Colombia”, y anunció que “no se harán más pagos y subsidios” al país sudamericano. Además, adelantó que impondrá nuevas tarifas comerciales como represalia.
La canciller Rosa Yolanda Villavicencio Mapy confirmó la decisión y señaló que Petro “informará en las próximas horas de las decisiones tomadas al respecto”. El Gobierno colombiano considera las declaraciones de Trump como una “amenaza directa a la soberanía nacional”, en medio de una escalada de tensiones por los recientes ataques estadounidenses a embarcaciones en el Caribe, algunas de ellas con ciudadanos colombianos a bordo.
Colombia, principal receptor de ayuda estadounidense en la región, recibió 230 millones de dólares en el último año fiscal, una cifra muy inferior a los más de 700 millones que recibió en años anteriores. La relación bilateral atraviesa su momento más delicado en años.