Lo que debía ser un verano de aprendizaje y diversión terminó en tragedia para una familia de Miami. Bolívar y Michelle Viteri presentaron una demanda de 10 millones de dólares contra el Coconut Grove Sailing Club y tres de sus monitores, luego de que su hija Catherine, de 11 años, sufriera una grave lesión durante un campamento de vela.
Según la querella presentada ante el Tribunal del Undécimo Circuito Judicial del condado de Miami-Dade, el 10 de julio, Catherine fue atropellada por una lancha a motor conducida por un monitor de 21 años mientras nadaba cerca del área del campamento. La hélice de la embarcación le causó una herida profunda en la pierna derecha que casi le cuesta la extremidad.
Los padres acusan al club y a los monitores de negligencia y falta de supervisión, asegurando que el joven encargado perdió de vista a los campistas momentos antes del impacto. “Este caso representa una falla inexcusable en la seguridad de los niños”, dijo el abogado de la familia, Justin B. Shapiro, quien calificó el hecho como “un acto de negligencia extraordinario”.
El club náutico no ha respondido a las solicitudes de comentario ni se ha informado sobre su representación legal.
El accidente de Catherine fue uno de dos trágicos incidentes ocurridos en campamentos de vela este verano. Apenas 18 días después, tres niñas perdieron la vida cuando una barcaza chocó contra un velero frente a Miami Beach, reavivando el debate sobre la seguridad en las actividades náuticas infantiles.