Edgar Alves de Andrade, alias Doca, uno de los máximos líderes del Comando Vermelho (CV), logró escapar este martes de la Operación Contención, considerada la más sangrienta en la historia de Brasil. El operativo, desplegado en los complejos de Alemão y Penha, tenía como principal objetivo capturar al poderoso narcotraficante, quien se encuentra prófugo.
Según la policía de Río de Janeiro, Doca utilizó a sicarios para crear un bloqueo que le permitió fugarse. “Es una estrategia que utilizan: dejan a los soldados al frente para obstaculizar la detención de los líderes”, explicó el secretario de Seguridad Pública, Víctor Santos. Las autoridades ofrecen una recompensa de R$100.000 (US$18.000) por información que conduzca a su captura.
Doca es señalado como autor intelectual del asesinato de André Lyra de Oliveira, alias Lápis, ocurrido en septiembre de 2021 en la comunidad de Quitungo, en Brás de Pina. El crimen se enmarca en una disputa territorial entre el CV y el Tercer Comando de la Capital (TCP), aliado con milicias locales.
Con más de 176 antecedentes penales registrados hasta 2023, Doca es considerado una figura clave en la expansión del CV en la Región Metropolitana de Río, donde la facción controla actualmente el 51,9% de las zonas dominadas por grupos armados. Su historial incluye delitos como homicidio, tráfico de drogas, tortura y posesión ilegal de armas.
Entre los crímenes más graves atribuidos a Doca figura el asesinato por error de tres médicos en Barra da Tijuca en octubre de 2023, y la presunta orden de ejecución de sus propios cómplices tras descubrir la equivocación. También se le acusa de haber autorizado el asesinato de tres niños en 2020, tras una disputa con un narcotraficante local.
Las investigaciones vinculan a Doca con el uso de drones lanzagranadas contra la policía en el operativo de esta semana, lo que refuerza su perfil como uno de los líderes criminales más peligrosos del país. Su captura sigue siendo una prioridad para las autoridades brasileñas.
Con información de la BBCMundo

