La obra Retrato de Elisabeth Lederer, del pintor austríaco Gustav Klimt, fue subastada el martes por 236,4 millones de dólares en Nueva York, convirtiéndose en la pieza de arte moderno más cara jamás vendida en una puja pública.
El récord se alcanzó durante la venta inaugural en la nueva sede de Sotheby’s en el edificio Breuer de Manhattan. Con esta cifra, la pintura se incorpora al exclusivo grupo de obras que han superado los 100 millones de dólares en subasta, encabezado por el célebre Salvator Mundi de Leonardo da Vinci, vendido en 450 millones de dólares.
Un hito para el mercado del arte
La venta consolida el atractivo de Klimt en el mercado internacional y reafirma el interés por piezas icónicas del arte moderno. El Retrato de Elisabeth Lederer, realizado en la primera mitad del siglo XX, se suma a la lista de “trofeos artísticos” que marcan hitos en la historia de las subastas.
El récord alcanzado en Sotheby’s refleja la fortaleza del mercado del arte de alto nivel y la creciente demanda por obras maestras que combinan valor histórico y exclusividad. Con esta venta, Klimt se posiciona como uno de los artistas más cotizados del mundo, junto a nombres como Leonardo da Vinci.

