El gobernador de Florida, Ron DeSantis, firmó este martes la orden de ejecución de Frank Athen Walls, de 58 años, condenado por múltiples asesinatos. La ejecución mediante inyección letal está prevista para el 18 de diciembre en la prisión estatal de Florida.
Walls fue declarado culpable en 1988 por el asesinato de Edward Alger, aviador de la Base Aérea Eglin, y su novia Ann Peterson, durante un robo con allanamiento de morada en el Panhandle de Florida en 1987. Tras la revocación inicial de la sentencia por la Corte Suprema estatal, fue nuevamente condenado a muerte en 1992.
Antecedentes criminales
Según los registros judiciales, Walls irrumpió en la vivienda de la pareja, los ató y atacó cuando intentaron resistirse. Posteriormente fue arrestado tras el hallazgo de objetos vinculados al crimen en su domicilio.
Las pruebas de ADN lo relacionaron además con la violación y asesinato de Audrey Gygi en mayo de 1987. En un acuerdo con la fiscalía, Walls admitió también su responsabilidad en los asesinatos de Tommie Lou Whiddon (1985) y Cynthia Sue Condra (1986).
Oleada de ejecuciones en Florida
La ejecución de Walls será la decimonovena en Florida en 2025, un récord histórico desde que se reinstauró la pena de muerte en 1976. El récord anterior, de ocho ejecuciones en un año, se había establecido en 2014.
DeSantis firmó la orden apenas dos días antes de la ejecución de Richard Barry Randolph, y otro convicto, Mark Allen Geralds, está programado para el 9 de diciembre.
En lo que va de 2025, 43 personas han sido ejecutadas en Estados Unidos, con Florida encabezando la lista. La más reciente fue la de Bryan Frederick Jennings, el 13 de noviembre, por el asesinato de su vecina.
Se espera que los abogados de Walls presenten apelaciones ante la Corte Suprema de Florida y la Corte Suprema de Estados Unidos. Mientras tanto, el estado continúa con un ritmo de ejecuciones sin precedentes, reflejando la política de mano dura impulsada por el gobernador DeSantis.