El presidente francés Emmanuel Macron concluyó este viernes 5 de diciembre su visita de Estado a China con una jornada marcada por gestos simbólicos y diplomáticos. En la ciudad suroccidental de Chengdu, Macron sorprendió a sus acompañantes al participar en una carrera matutina en el Parque del Lago Jincheng, antes de reunirse con su homólogo chino, Xi Jinping, en la histórica presa de Dujiangyan, Patrimonio de la Humanidad que regula los flujos de agua desde el siglo III a. C.
Xi Jinping y la primera dama, Peng Liyuan, mostraron a Macron y a su esposa, Brigitte Macron, la presa bimilenaria en un gesto que el mandatario francés calificó como “muy conmovedor”. La visita evocó el encuentro previo en mayo de 2024, cuando Macron recibió a Xi en los Pirineos, donde pasó parte de su infancia.
Macron subrayó que el viaje reflejaba un clima de confianza mutua y la voluntad de “actuar juntos” en un contexto de tensiones internacionales y desequilibrios comerciales que favorecen a China.
Diplomacia del panda y del deporte
Mientras Macron se reunía con estudiantes y con los hermanos tenistas Alexis y Félix Lebrun, estrellas olímpicas francesas presentes en China para la Copa Mundial de Tenis de Mesa por Equipos Mixtos, Brigitte Macron visitó la Base de Investigación de Cría de Pandas Gigantes de Chengdu. Allí conoció a Yuan Meng, el primer panda nacido en Francia en 2017, del cual es madrina, y que fue trasladado a China en 2023.
La llamada “diplomacia del panda” ha convertido a estos animales en embajadores de la amistad de China con países como Francia, Alemania o Japón.
Acuerdos y tensiones comerciales
El jueves, en Beijing, Macron exhortó a Xi a mediar por un alto el fuego en Ucrania y a corregir los desequilibrios comerciales con Europa. Aunque se firmaron 12 acuerdos de cooperación en áreas como energía nuclear, envejecimiento poblacional y conservación del panda, no se concretó el esperado pedido de 500 aviones Airbus, un punto clave para la industria francesa.
Analistas señalan que Beijing evita comprometerse en grandes compras de Airbus para mantener margen de negociación con Estados Unidos, que presiona por adquisiciones de Boeing.
Contexto internacional
China insiste en el respeto a la integridad territorial de los países y en la necesidad de conversaciones de paz, pero nunca ha condenado la invasión rusa de Ucrania. Occidente acusa a Beijing de sostener económicamente a Moscú mediante el suministro de componentes militares, algo que China niega.
En paralelo, Xi anunció una contribución de 100 millones de dólares para apoyar la crisis humanitaria en Gaza y la reconstrucción del enclave tras los ataques israelíes.
Un mensaje político
El presidente chino llamó a reforzar la confianza política con Francia y destacó la necesidad de que ambas naciones actúen con independencia y visión estratégica. “China y Francia deben demostrar su sentido de la responsabilidad, enarbolar la bandera del multilateralismo y mantenerse firmemente en el lado correcto de la historia”, afirmó Xi.
Con información de France24