La violencia fronteriza entre Tailandia y Camboya volvió a recrudecerse este lunes, cuando el ejército tailandés confirmó haber lanzado ataques aéreos contra posiciones militares en respuesta a un incidente que dejó un soldado muerto y cuatro heridos. Según el portavoz militar Winthai Suvaree, las tropas tailandesas fueron atacadas con armas de fuego desde el lado camboyano, lo que motivó la ofensiva aérea sobre infraestructura militar y depósitos de armas en varias áreas limítrofes.
La reacción de Camboya llegó horas después. La portavoz del Ministerio de Defensa, Maly Socheata, denunció que las fuerzas tailandesas atacaron a tropas en las provincias de Preah Vihear y Oddar Meanchey, aunque aseguró que sus soldados “no respondieron”. Autoridades locales reportaron disparos cerca de los templos históricos de Tamone Thom y Ta Krabei, lo que provocó el desplazamiento de numerosos pobladores.
El ejército tailandés informó que unas 35.000 personas fueron evacuadas de localidades próximas a la línea divisoria, en medio de los enfrentamientos y acusaciones cruzadas. El domingo ya se habían registrado choques armados en la misma zona, donde en julio pasado cinco días de combates dejaron 43 muertos y unos 300.000 desplazados, antes de que se alcanzara una tregua con mediación de Estados Unidos, China y Malasia.
Esa tregua, firmada en octubre y respaldada por el presidente estadounidense Donald Trump durante la cumbre de la ASEAN, fue suspendida por Bangkok en noviembre tras acusar a Camboya de la activación de una mina terrestre que hirió a varios soldados. Desde entonces, los incidentes se han multiplicado.
La disputa territorial entre ambos países se remonta a principios del siglo XX, cuando la frontera fue delimitada por Francia. Los templos antiguos situados en áreas limítrofes, como Preah Vihear, han sido foco recurrente de tensiones militares y diplomáticas, que ahora vuelven a poner en riesgo la estabilidad regional.
Con información de Infobae

