La FAA blinda el espacio aéreo sobre Mar-a-Lago por estructura sospechosa cerca de la residencia de Trump

65
Foto: The Times español

La Administración Federal de Aviación (FAA) estableció una zona de exclusión aérea permanente sobre Mar-a-Lago, la residencia del presidente Donald Trump en Palm Beach, Florida, alegando “razones especiales de seguridad”. La medida, que entró en vigor el 20 de octubre, tendrá una duración inicial de un año y prohíbe el vuelo de aeronaves dentro de un radio de una milla náutica y hasta 2.000 pies de altura, sin importar si el mandatario se encuentra en el lugar o no.

La decisión llega pocos días después de que el Servicio Secreto descubriera una estructura de vigilancia sospechosa cerca de la zona de aterrizaje del Air Force One, lo que generó preocupación sobre posibles amenazas a la seguridad presidencial. El FBI investiga el incidente, aunque hasta ahora no se ha identificado a ningún responsable.

A diferencia de las restricciones temporales que solo se activaban durante las visitas de Trump, esta prohibición será continua, afectando directamente las rutas de aproximación al Aeropuerto Internacional de Palm Beach (PBI), ubicado a menos de cinco kilómetros del club. Las aeronaves deberán desviarse hacia el norte, lo que incrementará el tráfico aéreo y el ruido sobre vecindarios residenciales como Flamingo Park y Grandview Heights.

El comisionado del condado, Gregg Weiss, advirtió que los residentes deberán adaptarse a esta nueva realidad, ya que la decisión fue tomada exclusivamente por la FAA y escapa al control de las autoridades locales.

En caso de una visita presidencial, la restricción se ampliará a un radio de 10 millas náuticas, con un anillo adicional de control que se extenderá hasta las 30 millas.

El refuerzo de los protocolos de seguridad ocurre tras el intento de asesinato contra Trump en 2024 y su creciente número de viajes a Palm Beach, donde ha pasado once fines de semana desde que inició su segundo mandato.