La ciudad de Miami se prepara para elegir este martes al sucesor del alcalde Francis Suárez en una contienda que, aunque oficialmente no partidista, tiene un marcado trasfondo político. Los aspirantes son Eileen Higgins, ex comisionada demócrata que obtuvo el mayor porcentaje de votos en la primera vuelta, y Emilio González, coronel retirado de la Fuerza Aérea y ex director de los Servicios de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS), respaldado por el presidente Donald Trump y el gobernador Ron DeSantis.
Higgins, de 61 años, podría convertirse en la primera alcaldesa demócrata de Miami en más de tres décadas si logra imponerse en la segunda vuelta. Su campaña ha girado en torno a la gestión del aumento del costo de vida, la transparencia en el gobierno municipal y la mejora de los servicios básicos, en una ciudad que enfrenta tensiones por la vivienda y el encarecimiento de la vida urbana.
Por su parte, González, de 68 años, busca capitalizar el apoyo del movimiento conservador y continuar la línea política de Suárez, uno de los aliados más visibles de Trump en Florida. Su propuesta se centra en reforzar la seguridad pública, impulsar el crecimiento económico y mejorar la gestión de emergencias, apoyándose en su experiencia militar y administrativa.
En la primera vuelta, celebrada el 4 de noviembre, Higgins obtuvo el 36 % de los votos frente al 19 % de González, lo que la colocó como favorita en esta segunda ronda. El ganador reemplazará a Francis Suárez, de origen cubano, quien asumió la alcaldía en 2017 y se postuló brevemente a la presidencia en 2024.
La elección se produce tras un intento fallido de Suárez y tres de los cinco comisionados de Miami de posponer los comicios hasta noviembre de 2026, con el argumento de ahorrar dinero y aumentar la participación.
Con información de El Nuevo Herald