En la Pequeña Habana activistas discutieron el impacto de Trump sobre inmigrantes

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(Miaminews24).- El sábado en horas de la tarde se dieron cita unos 40 activistas e inmigrantes, algunos de ellos indocumentados en la cafetería de la Iglesia San Juan Bosco en La Pequeña Habana para discutir el posible endurecimiento de las políticas migratorias cuando Donald Trump tome posesión como presidente el 20 de enero próximo.

La reunión, que se extendió por más de una hora, fue una de las primeras después de la elección de Trump el 8 de noviembre, donde los inmigrantes recibieron advertencias e información sobre qué se puede esperar en cuanto a inmigración cuando el presidente electo llegue a la Oficina Oval en la Casa Blanca.

Hubo pocos detalles específicos debido a que por ahora nadie sabe a ciencia cierta que es lo que Trump proyecta hacer en cuanto a los 11.1 millones de inmigrantes indocumentados que inicialmente amenazó con deportar en masa a través de una fuerza de deportación.

Sin embargo, después de la elección Trump pareció suavizar un poco su amenaza– no menciona ya la deportación en masa y limitándose mayormente a buscar la expulsión de entre dos y tres millones de inmigrantes que han cometido delitos. También ha dado a entender Trump que en cuanto asuma el poder, va a revocar de inmediato las acciones ejecutivas del presidente saliente Barack Obama que incluyen un programa de protección contra la deportación que cubre a más de 700,000 jóvenes cuyos padres indocumentados trajeron al país cuando eran niños.

Se explicaron los riesgos que puede haber en una administración Trump, María Bilbao, ativista

Los activistas junto a un abogado explicaron a los asistentes el posible impacto de la administración Trump sobre los que aún están sin papeles, cambios que se esperan sean drásticos después de que Obama cambiara su postura hacia los indocumentados en el 2010 cuando el entonces director de la Policía de Inmigración y Aduanas (ICE) suavizara la politíca de su agencia en cuanto a la detención y deportación de indocumentados.

 Al iniciar Obama su presidencia en el 2009, ICE deportaba una mayoría de inmigrantes que no tenían documentos. Gradualmente, las deportaciones se inclinaron más en contra de los inmigrantes con antecedentes penales. Aún así, Obama llegó a ser percibido por algunos activistas de inmigración como el “deportador en jefe” porque durante su mandato más de dos millones de indocumentados fueron expulsados del país.

“Se explicaron los riesgos que puede haber en una administración Trump”, dijo María Bilbao, una de las activistas que ayudaron a organizar la reunión, patrocinada por el capítulo de Florida del Sindicato Internacional de Empleados de Servicio (SEIU). “El nos ha amenazado bien, bien feo en la campaña y queremos estar preparados”.

Bilbao dijo que además de conocer los riesgos, los activistas quieren desarrollar una estrategia de protección para los indocumentados para que el temor no se generalice cuando comience el gobierno de Trump el 20 de enero.

11.1 millones de indocumentados

“Si estamos organizados y conectados vamos a estar más protegidos”, agregó Bilbao. “No va a ser lo mismo una administración Trump de lo que era una administración Obama”.

Bilbao señaló que después de la elección de Trump el miedo se ha apoderado de muchos indocumentados.

Una pareja de Honduras que estaba en la reunión con sus pequeños hijos no quiso dar una entrevista, aunque aceptaron ser fotografiados. Solo una de las personas entrevistadas admitió ser indocumentada, pero agregó que sus papeles están en camino de resolverse.

Por: Alfonso Chardy/El Nuevo Herald