(Miaminews24).- Cuando Alex Rodriguez entró a la sala de conferencias del Marlins Park, todo lo demás dejó de importar. Los peces habían reunido a los medios para presentar a sus tres nuevos integrantes, pero la presencia del ex pelotero llenó la sala con otra aire que no podían traer los jugadores elegidos en el Draft.
Tras hacer oficial la firma, el equipo les colocó los jerseys con sus nombres a Trevor Rogers (lanzador), Brian Miller (jardinero) y Joe Dunand (infielder), sobrino de Rodríguez, quien no podía ocultar el orgullo porque alguien continuara el legado familiar en el béisbol profesional.
«Me recuerda aquel día en que los Marineros me presentaron en Seattle», afirmó Rodríguez, actualmente disfrutando del retiro. «No puedo decir cuanto orgullo siento de verlo con el uniforme de los Marlins. El cumple el sueño de todo chico de Miami».
Y como todo chico de Miami, Dunand aprendió a jugar pelota por todos los parques de la ciudad, desde el Tropical hasta el Tamiami, hasta que en la preparatoria Gulliver su nombre comenzó a sonar, sobre todo por la hazaña de pegar jonrones en ocho juegos consecutivos.
Su tío siempre estuvo a su lado para darle consejos de la vida y el terreno, como cuando le indicó que se concentrara en la defensa: «el buen fildeo te matiene en el terreno, la ofensiva vendrá luego».
Y eso fue lo que sucedió en la Universidad Estatal de Carolina del Norte, pues tras una primera temporada con promedio de .219, el bate de Dunand despertó con .297 en la segunda y se reafirmó en la tercera con .289 y 16 cuadrangulares.
Los peces confían que en que Dunand, sin perder su sello propio, pueda traer algunas de las mejores cualidades de Rodríguez, quien finalizó una carrera de 22 contiendas con números de espanto, aunque sin dejar atrás la controversia por su vínculo con esteroides.
«Alex siempre fue mi inspiración y gracias a él crecí en un ambiente de mucha pelota», agregó Dunand, cuyo padre es medio hermano de Rodríguez. «Siempre trato de exprimir su mente para aprender al máximo. Gracias a él estoy aquí».
La vida profesional de Dunand comenzará en Greensboro, la filial de Clase A de los Marlins en la Liga del Atlántico Sur, donde podría pasar de torpedero a tercera base, si su cuerpo continúa creciendo.
Todavía es muy pronto para predecir el futuro de Dunand, de apenas 21 años, pero si realmente lleva en su ADN algo de Rodríguez, muy pronto se le podría ver de vuelta en Miami con el uniforme de los peces.
«Uno de los momentos que más recuerdo fue cuando Josh Beckett sacó el último out contra los Yankees en el 2003», agregó Dunand. «Quisiera vivir otro momento así con este equipo que siempre ha sido mi equipo, desde que era pequeño».
▪ La cadena de cinco éxitos del dominicano José Ureña en un lapso de siete aperturas es la mayor para un lanzador de los peces desde que el cubano José Fernández sumara ocho triunfos entre abril y junio del 2016.
▪ La victoria del viernes 2-0 con apenas tres imparables, se asemeja a la del miércoles ante Washington, cuando los de Miami se impusieron 2-1 con solo dos indiscutibles ante el soberbio Max Scherzer. Es primera vez en la historia de la franquicia que se logran dos éxitos con tres o menos hits.
Con información de NH.
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