Este lunes en Miami dio inicio un proceso civil con jurado federal contra Tesla para determinar si la compañía automotriz es culpable por la muerte de una mujer en un accidente ocurrido en 2019 en Florida, en el que estuvo involucrado un vehículo de la marca que operaba en modo piloto automático.
La demanda busca que Tesla sea responsable por un incidente ocurrido en abril de ese año en Key Largo, en el sur del estado, donde perdió la vida Naibel Benavides, de 20 años, y su pareja, Dillon Angulo, resultó herido. El accidente ocurrió cuando un conductor, George McGee, activó el piloto automático del coche mientras buscaba su celular y no prestaba atención a la carretera, lo que provocó la colisión.
Angulo y la familia de Benavides también acusan a Tesla de intentar «impedir la investigación del accidente«, afirmando que bloqueó a la Patrulla de Carreteras de Florida (FHP) para que no pudiera «tener acceso a información» del automóvil que «evidencia el papel de la falla del piloto automático en el incidente», según un documento judicial.
Los demandantes citan también como prueba que en 2024, Tesla convocó a revisión a más de 2 millones de vehículos para solucionar un problema de seguridad en su sistema de conducción autónoma. En una carta dirigida a los propietarios, la compañía «reconoció la existencia de un defecto y se comprometió a repararlo en todos sus automóviles».
Este proceso judicial, que se prevé que se decida el 31 de julio y es uno de los primeros donde la firma enfrenta a un jurado civil, añade presión adicional sobre la empresa del empresario Elon Musk para abordar las dificultades del piloto automático.
Solo el mes anterior, se reveló que alrededor de 10. 000 conductores en Australia participan en una demanda colectiva contra la empresa que busca compensación debido a un inconveniente en el sistema de frenado automático.
El 23 de junio, las autoridades estadounidenses pidieron información a Tesla sobre incidentes que ocurrieron en las primeras horas de su prueba de robotaxi en Austin, Texas, donde usuarios publicaron grabaciones mostrando a estos vehículos superando límites de velocidad o circulando en dirección contraria.
Y en 2024, el fabricante de automóviles eléctricos llegó a un acuerdo para resolver una demanda relacionada con un accidente que tuvo lugar en California en 2018, donde falleció el conductor, Walter Huang, de uno de sus vehículos semiautomáticos, aunque no se divulgó el monto del acuerdo.
Tesla afirma en su publicidad que el piloto automático está diseñado para aumentar la seguridad en la conducción, pero advierte a los chóferes que deben mantener siempre las manos en el volante.
Con información de elperiodicousa.com
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