El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, renovó este lunes su llamado para un recorte significativo en las tasas de interés, un movimiento que se produce justo antes de la reunión de política monetaria de la Reserva Federal (Fed). Aunque el mercado espera un anuncio de reducción el próximo miércoles, el presidente exige que el recorte sea «más de lo que había pensado».
En una publicación en su plataforma Truth Social, Trump declaró que el presidente de la Fed, Jerome Powell, «debe recortar las tasas de interés, ahora, y más de lo que había pensado».
El mercado ya anticipa una reducción de 0.25% al finalizar la reunión de dos días del banco central. Todas las miradas están puestas en los comentarios que Powell hará después del encuentro, ya que cualquier movimiento, si es considerable, podría impulsar la economía más grande del mundo en un momento en que el mercado laboral muestra signos de debilidad.
Un contexto de presión política y económica
Este sería el primer recorte de tasas de 2025. La Fed ha mantenido los tipos estables desde su última reducción en diciembre, monitoreando los efectos de los aranceles de Trump sobre la inflación. A pesar de que la inflación se mantiene por encima del objetivo anual del 2% del banco, el impacto de los aranceles parece limitado por ahora.
Este contexto le da a los responsables de la política monetaria cierto margen de maniobra para fortalecer el mercado laboral, equilibrando la estabilidad de los precios con el objetivo de lograr el máximo empleo.
La presión sobre el banco central no es solo económica. Stephen Miran, el actual presidente del Consejo de Asesores Económicos de la Casa Blanca, podría ser confirmado como gobernador de la Fed horas antes de que comience el encuentro, lo que aumentaría la influencia de la administración Trump en el seno de la institución.