La fiscal general de Estados Unidos, Pam Bondi, anunció este lunes el despliegue de una “Fuerza Especial de Protección del ICE”, integrada por agentes del Departamento de Justicia, para resguardar las instalaciones del Servicio de Aduanas e Inmigración (ICE) y arrestar a “agitadores violentos” en el lugar de los hechos.
“El Estado de derecho prevalecerá”, afirmó Bondi en una publicación en la red social X, en la que prometió imputaciones federales con el máximo rigor legal. La fiscal compartió además un memorando dirigido al FBI, la DEA, los Marshals y otras agencias, en el que se advierte que no se tolerará violencia contra agentes federales.
La circular, que cita al presidente Donald Trump, describe una “nueva era de violencia política extrema” alimentada por campañas organizadas de intimidación, amenazas y radicalización. Según Bondi, los ataques contra agentes del ICE han aumentado más de un 1000% desde enero de 2025, con epicentros en ciudades como Los Ángeles y Portland.
Entre los incidentes mencionados figuran el asesinato del activista conservador Charlie Kirk, intentos previos contra Trump y el atentado que mató a la congresista demócrata Melissa Hortman y su esposo en junio.
La fiscal denunció que este fin de semana, mientras el gobernador de Illinois, J. B. Pritzker, y el alcalde de Chicago, Brandon Johnson, criticaban públicamente a ICE, más de 200 manifestantes bloquearon el acceso a un centro de procesamiento en Chicago, coreando consignas como “Arresten al ICE, disparen al ICE” e intentando invadir propiedad federal.
Bondi ordenó a todas las agencias vinculadas al Departamento de Justicia que movilicen agentes para defender al personal de ICE “dondequiera que sean atacados”, incluyendo Portland y Chicago. La nueva fuerza especial tendrá como misión reprimir disturbios ilegales y arrestar tanto a agresores directos como a quienes financien, coordinen o instiguen actos violentos.
Este domingo, once manifestantes fueron detenidos frente a un centro de ICE en Chicago. En paralelo, autoridades de Portland y del estado de Oregón presentaron una demanda contra la Administración Trump por el envío de fuerzas militares y el uso de “fuerza total” en su campaña para recuperar el control de las principales ciudades del país.