Consiguen regenerar un corazón después de un infarto grave

796

(Miaminews24).- Investigadores del Instituto del Corazón de Texas (Estados Unidos) han descubierto una capacidad de regeneración inédita en el corazón de ratones de laboratorio.

Durante el estudio, publicado en Nature, el equipo consiguió inactivar una ruta de señalización, llamada Hippo, que funciona como mecanismo de comunicación en el interior de las células cardiacas. Al hacerlo lograron multiplicar su capacidad de regenerarse después de un grave infarto. Así, indujeron daños en el corazón de los roedores para simular graves infartos y luego inhibieron la actividad de Hippo.

Con ello se logra, por una parte, favorecer la proliferación de las células musculares y aumentar la supervivencia del corazón. Además, por otro lado, se altera la aparición de fibrosis, el desarrollo de células no musculares en las zonas afectadas por el infarto.

Según el coautor del trabajo, John Leach, “después de seis semanas observamos que los corazones dañados habían recuperado su capacidad de bombeo hasta el mismo nivel que los corazones sanos”.

Las células cardiacas no se regeran

Cuando se produce un infarto, la sangre deja de fluir por los tejidos del corazón y el músculo acaba muriendo por la escasez de oxígeno que llega hasta las zonas afectadas. El mayor problema es que las células musculares del corazón no se regeneran, así que el órgano pierde capacidad de bombeo de forma permanente. Además, este se va debilitando y permitiendo el desarrollo de células que no se contraen, y por eso se pone en riesgo la supervivencia de las personas que han sufrido un infarto severo.

En palabras del otro coautor, James Martin, “el fallo cardiaco es la primera causa de mortalidad en las enfermedades del corazón. El mejor tratamiento, por el momento, es implantar algún dispositivo o hacer un trasplante de corazón, pero el número de órganos es limitado”.

Con información de

Miaminews24.